viernes, 15 de junio de 2012

Javier Aguirre, filmografía variada


Este es un post dedicado a un director de cine que hacía películas comerciales con el fin de poder hacer sus películas intimistas. Javier Aguirre Fernández nació en San Sebastián en 1935. Melómano reconocido, no acabó sus estudios de música porque le surgió la oportunidad de estudiar cinematografía en Madrid, su otra gran pasión. Mientras realizaba sus cursos en la Escuela Oficial de Cinematografía, escribía artículos de crítica de cine para publicaciones como Radiocinema o Primer Plano.

De sus 79 obras de celuloide, la mayoría pertenecen al género experimental. Aguirre creó una corriente llamada anticine basadas en una característica antinarración fílmica. Publicó hasta un manifiesto con el que se puede dar, rebuscando en alguna biblioteca pública con un buen fondo sobre cine. Sobre sus documentales anticine no es fácil hallar rastro alguno, así que he de centrarme, siendo además mi intención inicial, en su obra comercial.

El director donostiarra.

Javier Aguirre ha hecho prácticamente de todo en el cine español: Destape, comedia costumbrista, thriller, cine histórico, adaptación de novelas  y cine con ídolos del pop. Creo que si hay que llevar un orden, mejor que sea el de género cinematográfico, ya que el cronológico nos ocuparía demasiado tiempo deteniéndonos en cada película, y algunas son “al gusto de la época”. No seré yo, de todas formas, quien critique demasiado (Algo, sí) el fenómeno de “la españolada”, ya que si existió, y vaya si lo hizo, fue porque tenía demanda suficiente por parte del público. No olvidemos que el cine es un negocio y que hasta que Santiago Segura no hizo Torrente, el brazo tonto de la ley, la película más taquillera del cine español había sido, durante mucho tiempo, No desearás al vecino del quinto, con un Landa sacando pluma antológico.

Cine musical:

Si hay un director de cine en España que haya desarrollado películas para el lucimiento de estrellas de la canción ligera, ese ha sido Javier Aguirre, cuya segunda obra en dirección fue Los chicos con las chicas (1967) una cinta musical entre alegre, juvenil, cómica y con toque romántico con ídolos del pop incluidos. Esta es la película que los enloquecidos fans de los Bravos habrán visto cientos de veces. El grupo que cantaba aquello de black is black, se sumergió en esta aventura de celuloide para promocionarse. Aparte de Mike Kennedy y su conjunto, participa un buen elenco de actrices de la época, como Laly Soldevila. En el papel de “la chica”, Enriqueta Carballeira, que fuera después, primera esposa de Javier Aguirre.

Volveré a nacer es una cinta de 1973 rodada en México cuyo protagonista es Raphael y mezcla música, drama y algo de cine negro. Después, con el quinteto infantil Parchis rodó hasta cuatro películas comenzando por La guerra de los niños, 1980, la segunda guerra de los niños, 1981, las locuras de parchís , 1982 y parchís entra en acción, 1983. Rodó con estos niños cuatro de las ocho películas que el grupo protagonizó.  Javier Aguirre tuvo un verdadero filón con los cantantes que se dirigían al público infantil, ya que por esos años rodó Rocky Carambola (1981), con el inefable Rocco Torrebruno , y al año siguiente, en plena efervescencia del mundial de fútbol, fue el encargado de filmar Los pajaritos, cuya protagonista, como habrán adivinado por el título era María Jesús, y el acordeón, también.

Cine Cómico:

Javier Aguirre, para poder sufragarse sus filmes anticine, abundó la comedia costumbrista nacional, más conocida por “españolada”. Como he dicho antes, y a pesar de que muchos de sus guiones son insufribles, este tipo de películas tienen su raro valor, sobre todo por la interpretación de sus actores y actrices, que solían ser lo mejor de cada cinta. Su primer largometraje (Segundo tras un film experimental), del año 1965, se tituló Los oficios de Cándido donde Manolo Codeso rinde homenaje a los actores de cine mudo americano. En 1968 Aguirre rueda Los que tocan el piano, película escrita y producida por José Luis Dibildos. El título hace referencia a la toma de huellas dactilares para la ficha policial. Una historia que desgrana la más que trillada sensación de subdesarrollismo nacional y sobrevaloración de lo europeo. Al año siguiente llega Una vez ser hippy al año no hace daño (1969) Otra comedia costumbrista musical que cuenta la historia de un conjunto que va de feria en feria hasta que llega a Torremolinos al calor de las suecas y del summer of love…O lo que sea. Se visten con esas casacas imposibles que llevaba Cliff Richard, pelucones y a cantar en inglés. La –poca- gracia está en que se hacían llamar los “hippy-loyas”, una mezcla entre el nombre del grupo real “los Javaloyas”, y “los gilipollas”. Con el paso de los años, curiosamente, esta película se ve con cierta benevolencia.

Los calvos del cine español luciendo pelucón

Con Soltera y madre en la vida (1969) Aguirre empieza a encauzar una segunda lectura en estas comedias tan al gusto de aquella época.  Se toca un tema que pasaba siempre de puntillas en la hipócrita y católica España: El embarazo sin matrimonio previo. A pesar de ser la típica comedia española, hay un trasfondo algo más serio. Lina Morgan paseando su bombo, la preocupación del padre/abuelo, vestido de uniforme (guardia de parque), el novio/padre, que se quiere desentender y la caritativa ayuda de las prostitutas, que se vieron en ese trance por no poder pillar con un anillo a quienes les hicieron protagonistas de la burla y de la intolerancia de una sociedad pacata e hipócrita. 

Una comedia que no lo es tanto...

Llegan los 70 y a las comedias recatadas se les empieza a dotar de cierto erotismo. En de profesión, sus labores 1970 nos encontramos un film para lucimiento de Laura Valenzuela sobre los valores del matrimonio. El mismo año rueda el astronauta (1970) Viendo la llegada a la luna, unos amigos deciden montar una agencia aeroespacial española y llegar a la luna con un cohete marca ACME poco más o menos. Destaca Tony Leblanc en su característico papel de hombre pleno de autoconfianza. Otra del 70 es Pierna creciente, falda menguante. Película que refleja dos momentos de la vida entre 1916 y 1926. Para 1972, en Soltero y padre en la vida, aprovechan el éxito de soltera y madre en la vida, aplicando la nueva fórmula para que Aguirre rodara con José Sacristán de apocado protagonista, una historia en la que una danesa vivalavida pretende dejarle el fruto de su noche de pasión para que lo cuide él solo.

¡Qué no falte el botijo ni la boina sobre el casco!

Otras comedias rodadas fueron El mejor regalo; Los pecados de mamá; Cariñosamente infiel (Estas dos últimas con María Kosty como protagonista); Martes y 13, ni te cases ni te embarques, cinta para promoción del entonces trío cómico, En busca del huevo perdido, para lucimiento de las hermanas Hurtado y El amor sí tiene cura (1991), tardío film eroticofestivo con el inclasificable Fernando Esteso haciendo doblete y una espléndida Esperanza Roy subiendo el nivel.

Cine de terror:

Aguirre se adentra, en los años 70, en el género de terror que está en alza. En 1973 rueda El asesino está entre los trece, un relato de suspense con un argumento nada original sacado de 10 negritos de Agatha Christie. Un elenco de actores españoles y americanos lleva a término la historia, donde podemos encontrar a una jovencísima Carmen Maura y al inquietante Paul Naschy haciendo de mayordomo. El mismo año rueda El jorobado de la morgue y al año siguiente, El gran amor del conde Drácula, ambas con Paul Naschy de protagonista.

Cine del destape:

Alrededor de los últimos años del dictador Franco, se desarrolló un tipo de cine provocado por el fin de largos años de represión sexual. No es que aquellas películas fueran demasiado escandalosas, aunque para las mentalidades pudorosas de la época representaba un apuro difícil de salvar. Abundaba el desnudo femenino, pero el de los varones no dejaba de ser un muestrario de calzoncillos muy mal elegidos.
El insólito embarazo de los Martínez es una cinta de 1974 en la que se cuenta el embarazo que lleva el impagable Saza, en este caso. Es una comedia en la que ya empieza a asomar el muestrario de lencería tan típico de la época. La esposa del embarazado no es otra que Esperanza Roy, pareja del director. Posteriormente Aguirre rodó otras películas del destape como Vida íntima de un seductor cínico (1975); ligeramente viudas; la iniciación en el amor; Esposa de día, amante de noche; El consenso.

Scwartzenagger no fue el primer embarazado del cine ¡Ese Saza!

Cine basado en novela:

Estas son, a mi modesto entender, las mejores cintas que ha rodado Javier Aguirre en lo que se refiere a cine comercial. Un cine maduro y algo más serio que, curiosamente está basado en narraciones, la mayoría, noveladas:

Acto de posesión (1977), basada en un texto de Miguel de Unamuno llamado las dos madres. Un dramático triángulo amoroso en el que una manipuladora mujer pretende hacerse con el hijo de otra. Anterior a la mano que mece la cuna, pero que la recuerda con fuerza.

Carne apaleada (1978), excelente adaptación de la novela autobiográfica de Inés Palou del mismo nombre. Narra la dura vida de una reclusa (Esperanza Roy) que encuentra un desdichado amor en la prisión. Es una película difícil de encontrar. Lo único que es fácil hallar son el par de escenas homoeróticas entre Esperanza Roy y Bárbara Rey. Una lástima, porque la película es bastante buena.

Difícil de encontrar, una obra muy interesante

Vida/perra (1982): Espléndido trabajo de Esperanza Roy, porque es un monólogo bien llevado en el que Juanita Narboni nos cuenta aspectos de su vida. Basado en la novela  la vida perra de Juanita Narboni, de Ángel Vázquez Molina, un autor maldito que vivió los últimos años de la Tánger cosmopolita. Recientemente hubo una adaptación cinematográfica de la misma novela llamada igual que ella protagonizada por Mariola Fuentes.

Versión para el cine de una obra "maldita"

El polizón del Ulises (1987): Basado en un texto de Ana María Matute, y protagonizado por tres veteranas actrices, Imperio Argentina, Aurora Bautista y Ana Mariscal, narra la historia de un niño adoptado por tres hermanas solteras en medio de un aislado paisaje rural.

La monja alférez (1987): ¿Qué decir de esta película? Basado en la auténtica narración de una monja donostiarra llamada Catalina de Erauso que no deseaba sino vivir aventuras allá por el siglo XVII. Bastante fiel a lo que nos narró en su autobiografía, el papel protagonista lo lleva con mucha dignidad una poco elogiada Esperanza Roy. Nada que ver con la cinta mexicana cuya protagonista era una María Félix que se moría por ser una mujer convencional. La de Javier Aguirre es una película impactante.

Esperanza Roy a estocazo limpio

La diputada (1988): Basado en un texto de Germán Álvarez Blanco, en este caso es Victoria Vera la protagonista de esta historia que nos cuenta el aterrizaje de una diputada de provincias en las cortes de Madrid. Llega ingénua y acaba descubriendo toda la serie de trampas y embustes que circundan la vida de la alta política, mezclándose, además, con una aventura extramarital.

Sin duda la obra cinematográfica de Javier Aguirre es de lo más variada que uno puede hallar. Hacer cine durante los 60, 70 y 80 no era fácil en España si uno quería sacar los pies de la producción habitual. Cine musical para ídolos del pop, españoladas típicas, películas de terror con Naschy de protagonista, destape con argumentos inverosímiles y, sí, también películas estupendas basadas en relatos únicos. Este es el cine comercial que ha dirigido Javier Aguirre, sobre sus documentales  “anticine” es bastante más difícil encontrar información.

Ya cuento con que much@s resoplarán con haber leído "españolada" en un blog que habla de cine seriamente, pero, a pesar de la cuestionable calidad de aquellas películas, no dejan de pertenecer al mismo séptimo arte. Documentándome he encontrado un espléndido blog sobre este género del cine, que tiene sus adeptos. Para quien esté interesado este enlace os llevará.

Una cosica más. ¿Os habéis fijado que Javier Aguirre es, sobre todo, director de mujeres? Suelen ser sus protagonistas principales en sus mejores obras.

6 comentarios:

TRoyaNa dijo...

Juli Gan
la entrada me ha parecido muy interesante.
Estoy de acuerdo que nos gusten más o menos,"las españoladas"(al igual que "las americanadas" en USA)no dejan de ser parte de la historia del cine español y al tiempo dan testimonio de una época,unas costumbres,una sociedad que ha ido transformándose en paralelo a la industria cinematográfica hasta nuestros días y que continua,como no,en estado de ebullición.
De aquí a 20 años,las películas de hoy se verán seguramente con cierta condescendencia.El cine,como todo género creativo,tiene su contexto social.
En este marco,por lo que cuentas,Javier Aguirre,parece un pionero,pues se atrevió a abordar diversos palos e incluso a inventar una corriente cinematográfica "el anticine". Esquivar la velada censura y abordar ciertos temas peliagudos en la España de los 60,70 y 80 no deja de parecerme en cierto modo,una heroicidad: madres solteras?hombres embarazados?escenas homoeroticas?...
"massa pa la carabassa";)que decimos por aquí...
Otro tema que me ha venido a la cabeza,es cómo tratamos en este país a las actrices y actores que fueron claves en una época cuando llegan a cierta edad.....no estoy segura de que reciban en vida un justo reconocimiento,sino que en algunos casos,se les condena al olvido y la indiferencia.
En cualquier caso,tu entrada es digna de elogio y a mí personalmente,me encanta nos descubras todo este pasado reciente del cine español.

Bsts

LU dijo...

Comparto lo expresado por Troyana.

A mi me molesta especialmente el desprecio del que tanta gala se hace hacia cierto tipo de cine español. Cuando, sin embargo, todos nos hemos tragado tantos y tantos bodrios de Hollywood, pero de eso no renegamos….

Directores como Javier Aguirre, sorprendente toda la producción que ha realizado, fueron capaces de simultanear lo que les gustaba con lo que les daba de comer. Si querían hacer cine, tenían que aceptar las reglas del juego.

Sería estupendo que La2 o algún canal de cine rescatara esas obras tan difíciles de localizar, su cine más experimental.

Excelente entrada.

Biquiños

Bargalloneta dijo...

Juli,
tu entrada me ha pareceido de lo más interesante....
comparto mi opinión con nuestra respectivas compañeras....
yo siempre he sido una detractora de las españoladas ... lo reconozo.. pero estoy segura que muchas de estas películas tenian un trasfondo social como dice Troyana que quedaban diluidas con las chorradas...
Ni idea de este director, no tenia ni idea de quien era... pero tu hoy me has enseñado a conocerlo,
gracias

tafw (To a free world) dijo...

Olá

sou um músico português neste momento a fazer ou doutoramento sobre a música do compositor Joly Braga Santos para cinema. Acontece que procuro uma cópia do filme Continuum de Javier Aguirre, para o qual Joly Braga Santos fez Música. Este filme não se encontra em arquivos portigueses do meu conhecimento. Se alguém me conseguir põr em contacto com o realizador ou com a editora do filme muito agradeço. Meu email tafw.xxi@gmail.com
obrigado

jo pat dijo...

Alguna idea de cómo conseguir alguna de las películas de Javier Aguirre en DVD u otro formato? Me interesa en particular "La monja alférez" pues estoy haciendo una investigación sobre su vida. Soy un estudiante de Berkeley.

Tracia Producciones dijo...

Qué tal:


Para Jose: Ponte en contacto conmigo a través de radiocine@radiocine.org y te cuento.

Recientemente he hecho un corto documental sobre Javier Aguirre que estuvo preseleccionado para los Goya y desde luego seguir su vida y filmografía a mí me parece fascinante.

El artículo, por cierto, es magnífico, Enhorabuena Juli Gan.

Os dejo enlace al trailer de "Cómo empezar una película sobre Javier Aguirre". https://vimeo.com/65812288

Saludos,

Antonio Peláez