viernes, 25 de mayo de 2012

Frederica o la escandalosa señorita Pilgrim


Un par de récords de longevidad

El pasado 5 de enero, víspera de los Reyes Magos, mientras servidora de ustedes desfilaba vestida de mamarracha en la Cabalgata de Sus Majestades, un poco más al Oeste, en La Mesa, California, murió a la respetabilísima edad de 111 años y 183 días, Frederica Alexandrina Sagor Maas, conocida como Frederica Sagor, escritora y guionista de cine norteamericana. A su muerte se verificó que había sido la cuadragésima cuarta persona más longeva del mundo.

El otro récord lo batió su matrimonio con Ernest Maas, que antes de marido fue su compañero en labores de guionista. Se casaron en 1927 y permanecieron juntos hasta que Ernest murió en 1986: si no he calculado mal, durante 59 años en los que afrontaron la irrupción del cine sonoro, el crack del 29, en el que se arruinaron, varios terremotos y un intento de suicidio. Probablemente el suyo fuera el matrimonio más duradero de Hollywood de todos los tiempos. No tuvieron hijos.

Frederica y Ernest en la década de los 40


Para Frederica la longevidad fue una forma de vengarse de Hollywood, pues la industria no la trató lo que se dice bien y le hizo pagar muy caros su inconformismo y disidencia. Así declaró al San Francisco Chronicle en 1999:

Todos aquellos cerdos están ahora bajo tierra y yo todavía estoy aquí. No es una gran satisfacción, pero al menos es una satisfacción. 
¿Queréis conocer su historia? Adelante.


Rusa, judía, periodista y escribidora

Frederica nació con el siglo XX, en 1900, en Nueva York, de Agnessa y Arnold Zagorsky, emigrantes rusos de origen judío que anglonizaron su nombre, se convirtieron en Sagor y dieron ese apellido a sus cuatro hijas.

Frederica estudió periodismo en la Universidad de Columbia, trabajó en el New York Globe, luego en la productora Universal Pictures y así dio el salto a Hollywood y escribió, entre otros, el guion de El demonio y la carne (Flesh and the Devil), con Greta Garbo y John Gilbert.

Una vez en Hollywood, pasó por distintos estudios, los grandes de la época. Se dedicaba a adaptar novelas y a escribir guiones originales. Para que os hagáis una idea de cómo se trabajaba entonces, cuenta Frederica que a veces le daban un título y a partir de ahí tenían que construir todo el guion. Así sucedió, por ejemplo, con la peli The Waning Sex (El sexo menguante):
Era un trabajo muy duro. Tuve muchos problemas con el coguionista. Había que estar todo el tiempo alerta porque, en cuanto te despistabas, alguien se apropiaba de tu texto y desaparecías de los créditos. Y si protestabas, te colocaban la etiqueta de "problemática" y no te volvían a dar trabajo jamás; así que había que mantener la boquita cerrada.


La escandalosa señorita Pilgrim y los tiempos difíciles

Así (The shocking Miss Pilgrim) se titulaba el último guion que Frederica, en colaboración con Ernest, escribió para Hollywood en 1941. Trataba del feminismo a finales del siglo XIX y no vio la luz hasta 1947, en una versión casi irreconocible que 20th Century Fox produjo para Betty Grable y que es famosa porque supuso la primera aparición (unos segundos) en el cine de Marilyn Monroe.

Frederica contempló con horror cómo un tratamiento serio del trabajo femenino se convertía en un musical frivolón. Protestó airadamente y ese fue el final: Acabé con Hollywood y Hollywood acabó conmigo, escribió en sus memorias.

La pareja siguió viviendo muy precariamente, gracias a encargos para escribir artículos como "negros" y corregir textos ajenos. 

Para colmo de males, durante el maccarthysmo (1950-1954), el FBI interrogó a Frederica por haber colaborado en la publicación de dos manifiestos comunistas. La cosa se puso tan mal que Frederica y Ernest decidieron suicidarse:
Nos montamos en el Plymouth y fuimos despacito hasta lo alto de una colina. Aquella iba a ser nuestra última puesta de sol. El siguiente paso era encender el motor y dejarse caer ladera abajo. Allí estábamos abrazados y llorando y, de repente, pensamos: ¿Qué estamos haciendo? Fracasos, decepciones, pobreza, humillación... Nada de eso importaba. Nos teníamos el uno al otro y estábamos vivos.
A veces la vida es peligrosamente parecida al melodrama.


Las memorias

En 1999, a punto de cumplir los cien años, Frederica publicó su autobiografía y no dejó títere con cabeza ni en Hollywood ni en los gobiernos norteamericanos. 

Había comenzado a escribirla diez años antes, ante la insistencia del historiador Kevin Brownlow, y así produjo La escandalosa señorita Pilgrim: una escritora en los primeros tiempos de Hollywood

El libro creo que no está en español [Ahora sí está. Lo ha publicado Seix-Barral. Echad un vistazo a los comentarios] y no lo he leído, pero me encantaría hacerlo. Quienes lo han leído dicen que es una valiolísima aportación a la historia de las mujeres en la industria cinematográfica, salpimentada con anécdotas fascinantes y también pequeñas dosis de frustración ante la vacuidad de Hollywood, donde la gente trabajaba solo por la pasta.

Pero también tiene detractores que hablan de una profunda amargura y de retratos exagerados de todos los jefes con los que tuvo que lidiar, a quienes presenta como seres amorales, sin ética y sin corazón. Dice, por ejemplo:
Irving Thalberg tenía un ego hiperinflado y nunca conocí a nadie que quisiera ni confiara en Louis B. Mayer.
En su propia defensa declaró Frederica que todas sus acusaciones de robo de textos y plagios eran absolutamente ciertas.


Fin. The end

La historia de Frederica me fascina porque supone que hace solo unos meses había alguien vivo que trabajó en el cine mudo y que dejó uno de los escasos testimonios de la época que adopta un punto de vista femenino.

Frederica era franca, era divertida y cumplidos los cien años supo mantener su ingenio y su cinismo. Vedla en este vídeo de Reverie Productions, en el que la entrevistan cuando era ya centenaria. Yo, de mayor, quiero ser como ella. 

Os envía un abrazo vuestra amiga


Noemí Pastor



domingo, 20 de mayo de 2012

Veinte años sin Marlene.




6 de mayo de 1992. Uno de los más grandes iconos del cine del siglo XX moría en París dejando como legado más de medio centenar de películas. Aun hoy, Marlene Dietrich sigue siendo un icono cinéfilo de referencia mundial y me gustaría hacer con vosotros un repaso por su filmografía más destacada, si gustáis, en el vigésimo aniversario de su muerte.
No pretendo hacer un exhaustivo repaso de todas ellas, sólo una breve mención de las películas protagonizadas por Marlene que más influencia han tenido en su carrera.



El Ángel Azul (1930) supuso el debut en el cine de Marlene Dietrich como portagonista pues, como ya sabeis, Dietrich tuvo varios papeles en películas de cine mudo. 

El Ángel Azul está considerada como uno de los mejores films sonoros alemanes de todos los tiempos. Dirigida por Josef von Sternberg, ésta película sería la primera de las siete colaboraciones que ambos realizarían juntos.

La actuación de Marlene como Lola Lola se hizo muy famosa por ser la primera actriz que enseñaba los muslos en una película. Su reputación como mujer fatal acababa de empezar...



Marruecos (1930) fue la segunda película del tándem Sternberg-Dietrich. 

La carrera de Marlene ascendía como la espuma. Muchos la vieron como una segunda Greta Garbo. 

Marruecos, fue rodada en inglés y su partener fue Gary Cooper. El meteórico ascenso al estrellato de Marlene fue tan rapido que cuando la grabaron, ésta tuvo que aprenderse el guión fonéticamente, pues no le había dado tiempo a aprender inglés.

Si en El Ángel Azul, Marlene se hizo famosa por enseñar los muslos, aquí se haría famosa por lucir su famoso atuendo masculino. Aparte del famoso beso en los labios a otra mujer en una escena de la película. Su reputación como icono lésbico acababa de empezar...





El Expreso de Shangai (1932) fue la cuarta película de Marlene a cargo de von Sternberg. Hay quien dice que es la mejor interpretación de Marlene. Personalmente, pienso que la relevancia de la película radica en su gran importancia visual, y poco más. No obstante, es una de las películas más destacadas de Marlene, así que la incluimos en esta lista.





La Venus Rubia (1932) Última película de Marlene con von Sternberg. Con Sternberg el rol de Marlene no cambia mucho: mujer fatal curtida en los avatares de la vida. Como ya veis, no es que Sternberg me vuelva loca, precisamente, pero sus películas son cruciales en la carrera de Marlene Dietrich.




Capricho Imperial (1934) Por primera vez Marlene se atreve con un drama histórico, ambientado en la vida de Catalina la Grande o, lo que es lo mismo, Catalina II de Rusia.




El Diablo es una Mujer (1935) Más von Sternberg, más mujer fatal y, en este caso, española para más señas. Marlene se mete en el personaje de Concha Pérez. La película no hizo ninguna gracia en España. Estuvo prohibida y fue un escándalo al más puro estilo tipical spanish de la época. 




Deseo (1936) Típica comedia romántica de la época. A destacar, la participación del gran Ernst Lubitsch como productor y co-guionista.




Ángel (1937) Tras Deseo, Marlene colabora otras vez con Lubitsch, ésta vez como director. 

Aunque la película se trata más de un drama que de una comedia, del toque Lubitsch y el carisma de Marlene tiene que salir algo interesante, si o si... ¿o no?



Arizona (1939) Marlene también se atrevió con el Western. Eso sí, como cantante de saloon.




Berlín Occidente (1948) Marlene bajo la dirección de Billy Wilder en una película que, como alemana nacionalizada estadounidense, le costaría más de un disgusto patrio.

Marlene interpreta a una cantante de cabaret acusada de confraternizar con los nazis durante la guerra. Un gran trago para una mujer que siempre renegó de los nazis y que ayudó a los aliados estadounidenses poniendo su influencia artística en todo lo que se hiciera contra los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.




Pánico en la Escena (1950) De Billy Wilder a Alfred Hitchcock. Pánico en la escena es una muy buena película de intriga, imprescindible en la filmografía de Marlene Dietrich.




Encubridora (1952) Parece que Marlene tuvo una época donde los grandes directores se la rifaban. Fritz Lang trabajó con ella en Encubridora, su segundo western.




Testigo de Cargo (1957) Segunda colaboración de Marlene con Billy Wilder. Una gran película de suspense y una de las mejores de Marlene a nivel interpretativo.



Vencedores o Vencidos (1961) Marlene y otro de mis directores favoritos, Stanley Kramer.





Y hasta aquí mi repaso por las que creo son las películas más importantes en la carrera de Marlene Dietrich. No dudéis en aportar las que consideréis que se me hayan podido quedar en el tintero o, simplemente, vuestras favoritas. 

Si me tengo que quedar con alguna, creo que me quedo con Testigo de Cargo. Y tú, ¿con cual te quedas?


Bruja Truca.

sábado, 12 de mayo de 2012

Un tranvía llamado deseo




Elia kazan dirigió "Un tranvía llamado deseo" en 1951.
La película es una adaptación de la obra de teatro de Tennesse Williams y está interpretada por Vivien Leigh,Marlon Brandon,Kim Hunter y Karl Malden,entre otros.


La acción tiene lugar en el barrio francés de Nueva Orleans, en 1946/47, a lo largo de unos 6 meses y nos cuenta la historia de Blanche (Vivien Leigh),una mujer madura con un oscuro pasado,que decide irse a vivir temporalmente con su hermana Stella (Kin Hunter) y su cuñado Stanley (Marlon Brando).


Poco a poco,seremos testigos de como entre las cuatro paredes de esa casa,empieza a desquebrajarse una convivencia en la que se pone de manifiesto el inestable estado de salud mental de Blanche,la vulgaridad y brutalidad de Stanley y la fragilidad de Stella,en medio de un fuego cruzado en el que parece no haber tregua.En este contexto,un amigo de Stanley (Karl Malden)se enamorará de Blanche.


Blanche,perteneciente a una familia sureña pudiente venida a menos,se ha defendido de los desengaños de la vida a través de la mentira y la fantasía.Stanley,un hombre rudo con ascendencia polaca,no podrá resistir la tentación de investigar a Blanche para averiguar el motivo de su repentina visita que termina por convertirse en una fuente de conflictos continua entre Stanley y Stella.
Da la sensación de que Blanche ha soportado tal carga de sufrimiento en su vida,que ha rebasado su propio umbral,y se ha desactivado la cordura,construyéndose un refugio de falsa ilusión,donde reina a sus anchas la fantasía y la mentira que para ella no es mentira,es sólo una realidad paralela en la que sencillamente puede al fin,vivir sin sufrir.



Stanley (un deslumbrante Marlon Brando)se siente como un gallo desplumado en un corral de gallinas,ha de defender su territorio,marcarlo con la virilidad y con la fuerza,la tosquedad,la agresividad en su gesto y su palabra.Siente amenazado su liderazgo ante la renovada unión de las hermanas y hará lo indecible para alejar a Blanche de sus vidas.Si es necesario sacar a la luz las mentiras,desempolvará el pasado de Blanche sin piedad,sin ningún escrúpulo.Después de todo,a ojos de Stanley, Blanche es una remilgada,cursi y prepotente que le hace sentirse como un elefante en una cacharrería.



Blanche,es un juguete roto,una mujer que ha visto cómo la vida le arrebataba uno a uno sus sueños y se ha visto exiliada al borde del camino,por el inexorable paso del tiempo,por falta de contemplación de un devenir que no tuvo en consideración sus deseos.


Son dos mundos tan opuestos que inevitablemente entran en choque.
Stella,quiere a Blanche,sabe de su vulnerabilidad,de su frágil y ya vapuleada consistencia e intentará protegerla incluso también de la crueldad de Stanley, pero Stanley es como un Tsunami que va creciendo en la lejanía,es imposible ya parar su impacto y las consecuencias más pronto que tarde se dejarán sentir.
¿Quíen es más frágil en el fondo,Blanche o Stanley?
Blanche busca afecto,delicadeza,algo de amabilidad en su maltrecha vida.
Stanley es el macho alfa de la manada,acostumbrado a liderar una casa,siente como una amenaza la presencia de su cuñada,de repente unida a su mujer y estará dispuesto a todo para separarlas porque en el fondo,lo que le mueve,es el miedo a quedarse solo y aislado.


Maravillosa Vivian Leigh en el papel de Stella,sus ojos de animal herido,asustadizo,quebradizo, se quedan grabados en nuestra memoria.
 Inconmensurable presencia escénica de Marlon Brando,ya no sólo por su portentoso físico con esa camiseta blanca pegada a su cuerpo,si no por haber logrado con sus miradas y su agresividad uno de los papeles más imborrables en la historia del cine:Stanley Kowalsky.Actor de método....¿el mejor de la historia del cine?

Son muchos los que están de acuerdo en que "En un tranvía llamado deseo"la conjunción de teatro y cine roza la perfección,el texto,el guión,los escenarios......la interpretación de los principales protagonistas es sencillamente soberbia.

Hay tantos temas que se abordan en el texto-guión,que es casi un compendio sobre las emociones humanas:crueldad,frustración,celos,inseguridad,necesidad de afecto...a lo que se suma  el peso del irrefrenable paso del tiempo,la falta de escrúpulos y el miedo a quedarse solos y sin ningún tipo de amparo en los demás.



No voy a desvelar el final,pero hay una frase sublime que creo sintetiza a la perfección los anhelos de Blanche y en general no sólo de cualquier alma perdida e indefensa,si no de cualquiera de nosotros en algún momento de nuestra vida:
"...siempre he dependido de la amabilidad de los extraños"

En ese duelo sin tregua entre Stanley y Blanche ¿hay alguien que salga airoso en este escenario de almas infelices?
Os dejo una última cita,que me parece tremendamente reveladora:

"¿Recta? ¿Qué entiendes por recta? Una línea puede ser recta, o una calle ¿Pero el corazón de un ser humano? "







Troyana





viernes, 4 de mayo de 2012

Crimen y castigo



La novela de Dostoyevski (en una maravillosa experiencia  compartida con mi mejor amiga, que tantas tertulias provocaría), fue como una “revelación”. No pretendo ponerme mística, pero me dejó una huella muy profunda.

Se han realizado varias adaptaciones cinematográficas de esta obra. He de reconocer que me produce cierto pánico acercarme a una película después de una lectura tan apasionante. Sé que son dos formas de expresión artísticas diferentes, que no se puede comparar, etc. Lo sé, pero no siempre soy capaz de llevarlo a la práctica.

Mientras paso las hojas, en mi imaginación se va formando toda una galería de sensaciones, mi propia y caótica película. Un truco que me suele funcionar es dejar pasar un tiempo razonable entre literatura y cine. Olvido parte de mis ideas fantasiosas, y me dejo llevar.



TÍTULO ORIGINAL Crime and Punishment. DIRECTOR Josef von Sternberg. GUIÓN Joseph Anthony, S.K. Lauren (Novela: Fiodor Dostoyevski). FOTOGRAFÍA Lucien Ballard (B/N). REPARTO Peter LorreEdward ArnoldMarian MarshElisabeth RisdonRobert AllenPatrick Campbell. PRODUCTORA Columbia Pictures. EE UU 1935, 84 min.



Al principio me quedo a cuadros. Todo lo ruso desaparece de un plumazo. Escenario y personajes estilo urbanita americano años 30 (sin embargo se mantienen algunos nombres propios, utilizan kopeks y podría cumplir condena en Siberia...) No lo entiendo. Adaptación libre, muy libre, partamos de esa base.

Sinopsis: Raskolnikov, alumno aventajado de criminología, expone en un exitoso artículo su teoría sobre los hombres corrientes (que obedecen ciegamente la ley), y los extraordinarios – Napoleón – que están por encima del bien y del mal (salvadores de la humanidad). Él mismo se considera un ser superior y justifica el crimen cometido. ¿Conseguirá el jefe de policía su confesión? ¿Qué métodos empleará?



Cómo surge el proyecto: Peter Lorre abandona Alemania por invitación del partido nazi, y se traslada a Hollywood, donde Columbia Pictures le ofrece mil dólares semanales. Tras un año de inactividad, le propone a su jefe filmar Crimen y castigo y hacer el papel protagonista. Aceptan a cambio de que trabaje posteriormente con la Metro en Las manos de Orlac.



Sternberg recibe el encargo (guión y reparto ya establecidos, no negociables) ¿Qué opción le queda? Poner sus señas de identidad: utilización de luces, anteponer lo visual al argumento, primeros planos de rostros y miradas que expresan más que las palabras ...

Mi opinión



¿Crees que esta cara regordeta pasa hambre? Se supone que vive en la más absoluta miseria y apenas come.

Lo mejor es la batalla intelectual y moral con el inspector de policía, que irá minando la fortaleza y soberbia del asesino. Podemos intuir el ciclón mental que arrasa con la razón absoluta, y trae la culpa, los remordimientos, el miedo a confesar, la vergüenza, la búsqueda de un alma caritativa que le ayude y le quiera.

Extraordinaria fotografía y juegos de sombras. Maravillosa composición inicial:




¿Debo preocuparme por mi conciencia?

No hay prisión más terrible que la propia conciencia.

El prestigio, el dinero (o su carencia), la fé religiosa, la familia, la amistad y el amor. Hay tantos detalles que se quedan flotando en el aire sin saber de dónde vienen o adónde van. Personajes desdibujados, reacciones incomprensibles o demasiado bruscas. En definitiva, no he podido distanciarme lo suficiente del libro. Han “matado” al extraordinario Rodia Raskolnikov de Dostoyevski. Me he quedado tan desconcertada.



¿Qué hubiera pasado sin esa lectura previa?

Sternberg tampoco se quedó nada satisfecho, cumplió por obligación. Qué pena. Habrá que buscar otra versión más fiel, ¿rusa?

Curiosidades

Jorge Luís Borges en sus críticas de cine en la revista Sur aplaudió este trabajo, y confesó que aún no había leído la novela.



Con todo esto, me han entrado unas ganas tremendas de volver a ver M el vampiro de Düsseldorf, El halcón maltés y esa serie de Roger Corman basada en los cuentos de Poe, para reconciliarme con Peter Lorre.

¿Cómo conviven en vuestra cabeza literatura y cine? No siempre mi experiencia es tan radical, y disfruto con las dos vertientes. Unir dos pasiones debería sumar, no restar.

Hasta la próxima.

Biquiños.

LU